Abogados de lesiones por quemaduras de Nuevo México

Los distintos tipos de lesiones por quemaduras

Las lesiones por quemaduras se producen de diversas formas, cada una con una serie de causas, complicaciones y tratamientos. Comprender el tipo de lesión por quemadura y su tratamiento y pronóstico habituales es crucial a la hora de presentar una reclamación legal. He aquí algunos de los tipos más comunes de lesiones por quemaduras que sufren las víctimas.

Quemaduras térmicas

Las quemaduras térmicas se producen al exponerse a fuentes externas de calor que elevan la temperatura de la piel y los tejidos, provocando la muerte celular o carbonización. Estas quemaduras son el resultado de varias fuentes diferentes, entre ellas:

• Llamas: la exposición directa a las llamas es una causa frecuente de quemaduras térmicas, que a menudo se producen en incendios domésticos, accidentes de tráfico o incendios al aire libre;
• Líquidos calientes o vapor: estas quemaduras, denominadas escaldaduras, son una lesión doméstica frecuente, especialmente en los niños.
• Metales calientes, vidrio u otros objetos: las quemaduras por contacto al tocar superficies calientes, como estufas, planchas o maquinaria industrial, suelen ser graves.

Estos tipos de quemaduras son algunos de los más comunes. Sin embargo, varían en gravedad. La mayoría de las quemaduras térmicas en un entorno doméstico son superficiales.

Quemaduras químicas

Las quemaduras químicas se producen cuando un irritante, como una sustancia ácida o alcalina, entra en contacto con la piel o los ojos. Estas quemaduras causan daños no sólo en la superficie, sino también en los tejidos más profundos, dependiendo de la concentración química y de la duración de la exposición. Tanto los productos químicos domésticos como los industriales son causas potenciales de quemaduras químicas.

Quemaduras eléctricas

Las quemaduras eléctricas son el resultado del paso de corriente eléctrica a través del cuerpo, causando lesiones rápidas. Estas quemaduras son engañosas, ya que el daño externo puede parecer mínimo en comparación con las posibles lesiones internas. Generalmente, las quemaduras eléctricas están causadas por:

• Contacto directo con fuentes eléctricas: esto incluye tocar cables con corriente, enchufes eléctricos o rayos;
• Arcos voltaicos: causados por arcos eléctricos que saltan de las zonas de alta tensión al cuerpo, lo que a menudo provoca quemaduras graves; y
• Flashes: se producen cuando la energía eléctrica provoca una explosión o un fogonazo, quemando la piel sin contacto directo.

Normalmente, las quemaduras eléctricas presentan un peligro más inmediato y requieren atención médica inmediata, sobre todo si la víctima pierde el conocimiento.

Desglose de los grados de quemadura

Los profesionales médicos clasifican las lesiones por quemaduras en función de su gravedad, desde quemaduras de primer grado hasta quemaduras de cuarto grado. Cada grado indica un nivel diferente de daño en la piel y los tejidos subyacentes. Cuanto mayor es el grado, más daño causa la quemadura en la zona afectada.

Cuarto grado

Las quemaduras de cuarto grado son las más graves, ya que se extienden más allá de la piel y afectan a músculos, ligamentos, tendones, nervios, vasos sanguíneos y huesos. La zona afectada se ennegrece o aparece seca y correosa. Además, puede haber una pérdida completa de sensibilidad debido al daño extenso de los nervios. Estas quemaduras no se curan por sí solas y requieren una amplia intervención médica. La intervención abarca desde medidas para salvar vidas y prevenir infecciones hasta cirugía reconstructiva o amputación.

Tercer grado

Las quemaduras de tercer grado penetran en el espesor de la piel, destruyendo tanto la epidermis como la dermis. El lugar de la quemadura puede tener un aspecto blanco, marrón o carbonizado, y la zona puede estar entumecida debido a la destrucción nerviosa. A pesar de la gravedad, al principio puede haber menos dolor debido al daño nervioso. Estas quemaduras no cicatrizan bien y suelen requerir una intervención quirúrgica, como un injerto de piel. La recuperación es un proceso largo y suele dejar cicatrices importantes y pérdida de funcionalidad.

Segundo grado

Las quemaduras de segundo grado afectan a la epidermis y la dermis (la segunda capa de la piel), causando daños más extensos. Estas quemaduras provocan enrojecimiento intenso, hinchazón y ampollas. Las ampollas pueden reventar y perder líquido, haciendo que la piel parezca húmeda. El dolor puede ser intenso debido a la lesión nerviosa en la dermis. El tiempo de cicatrización varía de dos a seis semanas, dependiendo de la gravedad de la quemadura y de los cuidados que reciba. El cuidado adecuado de la herida es crucial para prevenir infecciones y minimizar las cicatrices. Sin embargo, algunas quemaduras de segundo grado pueden requerir injertos de piel.

Primer grado

Las quemaduras de primer grado son las menos graves, ya que sólo afectan a la epidermis, también conocida como capa externa de la piel. Estas quemaduras suelen causar enrojecimiento, inflamación leve y dolor. Por lo general, la piel está sensible al tacto, pero no se forman ampollas. Las quemaduras de primer grado suelen curarse en un plazo de 7 a 10 días sin dejar cicatriz, ya que las células de la piel se regeneran tras el daño. Además, el tratamiento es sencillo: agua fría, lociones calmantes y analgésicos de venta sin receta.

Los cuatro elementos para demostrar la negligencia en una demanda por quemaduras

Para probar la negligencia en un caso de lesiones por quemaduras, el demandante debe demostrar los cuatro elementos siguientes:

• Deber de diligencia. El demandado tiene la obligación legal de actuar de una determinada manera con el demandante. En los casos de lesiones por quemaduras, esto podría significar el deber de un empleador de proporcionar un entorno de trabajo seguro, el deber de un fabricante de producir productos seguros o el deber de un propietario de mantener unas instalaciones seguras.

• Incumplimiento del deber. El demandado incumplió su deber de diligencia. Este incumplimiento puede consistir en una acción insegura o en la omisión de una acción que habría evitado el daño.

• Causalidad. El incumplimiento del deber por parte del demandado causó directamente las lesiones del demandante. Para este elemento, el demandante debe demostrar que su lesión por quemadura no se habría producido de no ser por la negligencia del demandado.

• Daños y perjuicios. El demandante ha sufrido daños reales como consecuencia del incumplimiento. En este caso, el demandante debe sufrir algún tipo de pérdida, que puede ser física, emocional o económica.

Demostrar todos estos aspectos de la negligencia es todo un reto. Requiere varias formas de evidencia que son difíciles de obtener. Sin embargo, nuestros abogados de lesiones por quemaduras de Nuevo México saben qué tipos de pruebas buscar y qué testigos expertos consultar para una demanda por lesiones por quemaduras.

Daños potenciales tras una lesión por quemadura

En los casos de lesiones por quemaduras, las víctimas pueden reclamar diversos daños y perjuicios para compensar pérdidas económicas y personales. La ley divide estos daños en dos categorías: económicos y no económicos.

Los daños económicos son los gastos en que usted incurre. Es decir, tienen un valor económico tangible que se mide con estimaciones, recibos, presupuestos, etc. Suelen incluir cosas como:

• Los salarios perdidos,
• Gastos médicos,
• Pérdida de capacidad de ganancia, y
• Costes de rehabilitación.

Por el contrario, los daños no económicos son sus pérdidas intangibles tras una lesión por quemadura. En otras palabras, no suelen medirse en términos económicos y son subjetivos. Algunos ejemplos son:

• Dolor y sufrimiento,
• Pérdida del disfrute de la vida,
• Pérdida de consorcio,
• Angustia emocional, y
• Desfiguración grave.

Aunque la medición de estos daños es muy personal, nuestros abogados expertos en lesiones por quemaduras comprenden el efecto a largo plazo que pueden tener en la vida de las víctimas. Por lo general, varían mucho en función de cada caso.

Los abogados de lesiones por quemaduras de Tawney, Acosta & Chaparro P.C. están aquí para ayudar

Si usted o un ser querido ha sufrido una lesión por quemadura debido a la negligencia de otra persona, Tawney, Acosta & Chaparro P.C. está aquí para ayudarle. Nuestros abogados de Nuevo México especializados en lesiones por quemaduras comprenden las complejidades de estos casos y brindan una representación compasiva y eficaz.

Con un historial de éxito y reconocimiento de la industria por Super Lawyers y The National Advocates, siempre damos a nuestros clientes la atención individual y el cuidado que necesitan. Póngase en contacto con nosotros hoy para una consulta gratuita, y permítanos ayudarle en su camino hacia la recuperación y la justicia.