Nunca es fácil perder a un ser querido.
Sin embargo, saber que la pérdida podría haberse evitado hace que sea aún más doloroso.
Cuando alguien fallece debido a la negligencia o los actos ilícitos de otra persona, los familiares supervivientes pueden presentar una demanda por homicidio culposo.
Mientras se curan de su pérdida devastadora, un abogado de muerte injusta ayuda a los miembros de la familia a navegar por el difícil camino por delante y perseguir la compensación que necesitan para seguir adelante. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para una consulta gratuita.
¿Qué es una demanda de muerte por negligencia en Nuevo México?
El artículo 41-2-1 de los Estatutos de Nuevo México define el homicidio culposo como una muerte "causada por el acto ilícito, la negligencia o el incumplimiento de otro".
En estas circunstancias, la ley da derecho a determinadas partes a recuperar los daños y perjuicios como si la muerte no se hubiera producido y la persona fallecida (difunto) pudiera presentar su propia demanda por daños y perjuicios.
Por lo tanto, aunque la víctima haya fallecido, los familiares supervivientes pueden recuperar los daños del fallecido de la parte responsable.
¿Qué es la Ley de Homicidio Culposo de Nuevo México?
De acuerdo con los estatutos de Nuevo México, un "homicidio culposo" se refiere a un fallecimiento resultante de las acciones ilícitas, negligencia o incumplimiento de otra parte. Esto se rige por N.M. Stat. § 41-2-1 (2021), que delinea el marco legal que rodea tales incidentes.
Según la ley, los daños se distribuyen de la siguiente manera:
- Un cónyuge sin hijos: Cuando el difunto estaba casado pero no tenía hijos, todos los ingresos de una demanda por muerte por negligencia van al cónyuge superviviente.
- Un cónyuge con hijos: Cuando al fallecido le sobreviven un cónyuge y sus hijos, la mitad de las ganancias de la demanda por homicidio culposo se destinan al cónyuge superviviente, mientras que la otra mitad se reparte a partes iguales entre los hijos.
- Sin cónyuge, pero con hijos: Cuando no hay cónyuge superviviente, pero hay hijos, el producto de la demanda por homicidio culposo se divide a partes iguales entre los hijos supervivientes del difunto.
- No hay cónyuge, ni descendientes, ni padres: En las situaciones en las que el difunto no tenía cónyuge, hijos o padres supervivientes, los beneficios de cualquier demanda por muerte por negligencia van a parar a los hermanos del difunto a partes iguales.
Un abogado de muerte por negligencia de Nuevo México entiende las complejidades de estas demandas. Perseguir una demanda en nombre de un ser querido a menudo se siente abrumador en medio de su dolor.
Sin embargo, la indemnización puede ayudarle a avanzar en la vida, por lo que es importante que recupere lo que le corresponde según la ley.
Sin embargo, negociar o litigar una indemnización justa sin la ayuda de un abogado especializado en muerte por negligencia es difícil, si no imposible.
¿Quién puede presentar una demanda por homicidio culposo en Nuevo México?
La Ley de Homicidio Culposo de Nuevo México exige que se designe un representante personal para presentar una demanda por homicidio culposo.
Este representante personal es diferente del representante personal que un tribunal nombra para administrar la sucesión del testamento de un difunto.
Se asigna un representante personal de la muerte por negligencia y se presenta la demanda de muerte por negligencia en su nombre.
Además, esta persona trabaja con un abogado especializado en muerte por negligencia para distribuir adecuadamente los daños concedidos en virtud de la Ley de Muerte por Negligencia.
¿Qué puede ayudarme a recuperar un abogado?
Un representante personal puede recuperar daños punitivos y compensatorios por una demanda de muerte por negligencia.
Los daños punitivos pretenden castigar a la parte responsable por la conducta particularmente ilícita que causó la muerte por negligencia.
Los daños y perjuicios compensan a los seres queridos del fallecido por las pérdidas económicas y emocionales resultantes.
La ley de Nuevo México divide las pérdidas compensatorias en daños económicos y no económicos.
Los daños económicos representan pérdidas tangibles y calculables directamente relacionadas con la muerte de la persona fallecida. Incluyen los siguientes gastos:
- Gastos al final de la vida,
- Facturas médicas, y
- Pérdida de ingresos.
Los daños no económicos incluyen las pérdidas intangibles y subjetivas relacionadas con la muerte.
Entre ellas se encuentran las siguientes:
- Angustia emocional,
- Dolor y sufrimiento,
- Pérdida de orientación para los hijos del difunto, y
- Valor de la vida del difunto al margen de la capacidad de ganancia.
Aparte de una demanda por muerte por negligencia, los supervivientes también pueden presentar una demanda por pérdida de consorcio. Su abogado de muerte por negligencia también puede ayudarle con una acción separada de los sobrevivientes.
Contacto
En Tawney, Acosta & Chaparro P.C., estamos comprometidos a ayudar a las víctimas lesionadas en y a lo largo de Nuevo México y Texas.
Trabajamos sin descanso en nombre de nuestros clientes que se enfrentan a los momentos más difíciles de su vida.
Cuando los clientes vienen a vernos, sabemos que pueden estar afligidos por la pérdida de un ser querido que sufrió lesiones mortales.
Cuando aceptamos un caso, sabemos lo que está en juego. Déjenos ayudarle para que no pase por esto solo.
Póngase en contacto con nosotros hoy para una consulta inicial gratuita.
James Tawney
James Tawney es un nativo del suroeste dedicado a servir a su comunidad. Nació y creció en Arizona, donde asistió a la Universidad del Norte de Arizona, donde obtuvo su licenciatura. James luego pasó a asistir a Texas Tech University School of Law en Lubbock, Texas. En 2016, junto con su colega abogado demandante Alejandro Acosta, fundó Flores, Tawney & Acosta, P.C. con oficinas ubicadas en Las Cruces y Carlsbad, Nuevo México, y El Paso, Texas.
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