Todd Perchert, de 55 años, sufrió heridas graves en un accidente de coche en el que se vio implicado el jefe de policía de Albuquerque Harold Medina, que se saltó un semáforo en rojo mientras supuestamente escapaba de un tiroteo. La colisión dejó a Perchert con huesos rotos, un pulmón colapsado y extensas laceraciones. A pesar de la intervención quirúrgica y la larga estancia en el hospital, Perchert sigue sufriendo dolores importantes y se enfrenta a una recuperación prolongada. Medina y su esposa salieron ilesos. Perchert y su esposa, Danielle, exigen responsabilidades y critican las acciones de Medina y los elogios del alcalde Tim Keller al jefe. Han iniciado una demanda civil contra la ciudad y el departamento de policía, alegando que Medina violó los protocolos. Se está llevando a cabo una investigación interna, pero la familia se pregunta por qué no intervino la Policía Estatal de Nuevo México. Su abogado, James Tawney, les representa en la búsqueda de justicia por el incidente.